jueves, 23 de mayo de 2019

128.- DE ADÁN A JESUCRISTO. CAP. 1º: ADÁN...NOÉ...ABRAHAM (0 - 1800 a. C.)128.-

Según la Biblia, nuestros primeros antepasados vivían felices hasta que desobedecieron a Dios (Gen 3,6) y, desde ese instante, ellos y todos sus descendientes quedamos inclinados al mal y tenemos que pagar el precio de este pecado con la muerte.
Dios se compadeció e hizo una promesa de redención: “Yavé dijo a la serpiente...pongo perpetua enemistad entre tí y la mujer, entre tu linaje y el suyo, éste te aplastará la cabeza” (Gen 3,14-15). Se refiere al Mesías que nacería del linaje de Eva. Esta es la primera manifestación del "designio de Dios sobre la Humanidad" que Yavé concretará en la "Alianza con Noé y Abraham".
Descendientes de Adán y Eva hasta Noé: Adán y Eva tuvieron dos hijos que se llamaron Caín y Abel, que eran labrador y pastor. Ambos hicieron ofrendas a Yavé. Las ofrendas de Caín no agradaron a Yavé y sí las de Abel, lo que llevó a Caín a matar a su hermano. Con los años, la descendencia de Caín fue muy numerosa. También Adán y Eva tuvieron otros hijos e hijas (Gen 5,4).
Genealogía de Noe: Adán, Set, Enós, Cainán, Mahalcel, Jared, Enoc, Matusalén, Lamec y Noé. Mientras tanto, los hombres se multiplicaron sobre la tierra y tanto creció la maldad que “Yavé se arrepintió de haber hecho al hombre” (Gen 6,6) y decidió exterminarlo por medio de un diluvio.
ALIANZA DE YAVÉ CON NOÉ
Barco de Noé
Noé era justo y perfecto entre sus contemporáneos y siempre anduvo con Yavé” (Gen 6,9), por lo que él, su mujer y sus hijos fueron salvados del diluvio.
Terminado el diluvio, Yavé dijo a Noé: “Voy a establecer mi alianza con vosotros y con vuestra descendencia...no habrá ya más un diluvio que destruya la tierra”(9, 9-11).
Comentario: El relato del diluvio presenta a Dios como juez que castiga la corrupción y la maldad humana y, al mismo tiempo lo presenta misericordioso con los que, aún siendo pecadores, intentan seguir por caminos de justicia y rectitud. El diluvio en el texto aparece como universal, que cubrió todo la tierra y destruyó a todos los hombres, menos Noé y su familia que fueron salvados. Esta tradición fue aceptada por los pueblos antiguos. Los estudios más modernos se inclinan a pensar que, en el paleolítico, el diluvio fue consecuencia del último periodo glaciar hace unos doce mil años. (1)
Descendencia de Noé: Terminado el diluvio, Yavé dijo a Noé: ”Sal del arca tú y tu mujer, tus hijos y las mujeres de tus hijos” (Gen 8,15), un total de ocho personas “y a partir de ellos se pobló toda la tierra” (Gen 9,19). Los hijos de Noé fueron Sem, Cam y Jafet. Pasadas nueve generaciones en las que todos engendraron hijos e hijas, Téraj, un descendiente de Sem, vivía en Ur de los caldeos con su mujer y sus hijos Abrán, Najor y Harán.

HISTORIA DE ABRAHAM
Viajes de Abraham
Yavé llamó a Abrán y le ordenó salir de Ur e ir a la tierra que Él le mostraría (12,1). “De tí haré una nación grande y te bendeciré” (12,2). “Tomó Abrán a Saray, su mujer y a Lot, hijo de su hermano Harán, con toda la hacienda y el personal y salieron para dirigirse a Canaán” (12,5), acampando finalmente en el Negueb. A causa de una hambruna, Abrán bajó a Egipto. Saray, que era muy hermosa, fue llevada al palacio del faraón y éste la tomó por mujer, creyendo que era hermana de Abrán, al que obsequió con ovejas, vacas, asnos, siervos, siervas, asnas y camellos (Gen 12,16ss). El faraón descubrió la mentira de Abrán y le dijo: “Qué has hecho conmigo? ¿Por qué no me avisaste que era tu mujer? Aquí tienes a tu mujer, tómala y vete” (12,18-19).
Retorno a Canaán: De Egipto subió Abrán al Negueb (13,1) y se estableció en Canaán (13,12). Yavé dijo a Abrán: “Toda la tierra que ves te la daré a tí y a tu descendencia para siempre” (13,15). “Desde el río de Egipto hasta el Río Grande, el Éufrates” (Gen 15,18).
Nacimiento de Ismael: “Al cabo de diez años de habitar Abrán en Canaán, su mujer Saray (que era estéril) tomó a su esclava Agar y se la dio por mujer a su marido Abrán” (16,3).En este episodio se aplica el Código de Hammurabi, por el que la mujer estéril podía dar a su marido una esclava por mujer, perdiendo él su derecho a repudiarla.“Agar dio a luz un hijo a Abrán y éste le llamó Ismael” (16,15).
Renovación de la Alianza y cambio de nombre de Abrán: Así habló Yavé: “Esta es mi alianza contigo: Serás padre de una muchedumbre de pueblos. No te llamarás más Abrán, tu nombre será Abraham” (Gen 17,4-5).
La circuncisión: “A los ocho días será circuncidado entre vosotro todo varón, de generación en generación” (17,12).
Cambio del nombre a Saray: “A Saray, tu mujer, ya no la llamarás Saray, sino Sara. Yo la bendeciré y ella también te dará un hijo” (17,15-16). “Y le pondrás por nombre Isaac” (17,19).
Nacimiento de Isaac: “Concibió Sara y dio a Abraham un hijo en su vejez. Abraham le puso el nombre de Isaac… y le circuncidó a los ocho días” (21,2-4). La lactancia, según Mac 7,27, solía durar tres años y a su fin se celebraba un gran banquete.
Expulsión de Agar y de Ismael: Sara vio a Ismael que se estaba burlando y dijo a Abraham: “Echa a esa esclava y a su hijo, pues el hijo de una esclava no va a heredar con mi hijo” (21,10). Abraham lo sintió mucho, pero Yavé le dijo: “También del hijo de tu criada haré un gran pueblo” (21,13).

LA PRUEBA DE ABRAHAM
Sacrificio de Isaac
Yavé probó a Abraham diciéndole: “¡Abraham, Abraham! Toma a tu hijo, a tu unigénito, al que tanto amas, a Isaac, vete a la tierra de Moriab y ofrécemelo allí en holocausto” (Gen 22,1-2). Abraham se puso en camino con su hijo Isaac, al que cargó con la leña del holocausto y él tomó el fuego y el cuchillo. Hay aquí un diálogo enternecedor entre ambos:
- Isaac: ¡Padre! 
- Abraham: ¿Qué quieres, hijo mío? 
- Isaac: Llevamos el fuego y la leña, pero, ¿dónde está el cordero para el holocausto? 
- Abraham: Dios proveerá, hijo mío. 
Llegados al lugar, Abraham construyó el altar, dispuso la leña, ató a Isaac y lo puso sobre el ara, encima de la leña. (Gen 22,7-9).
La fe de Abraham: “Abraham tomó el cuchillo para degollar a su hijo, pero un ángel de Yavé le gritó: ¡Abraham! ¡Abraham!Él contestó: Aquí estoy.Y el ángel añadió: No alargues tu mano sobre el niño, no le hagas nada, ahora ya sé que eres temeroso de Yavé, pues no has perdonado a tu único hijo” (22,10-12).“Abraham vio un carnero enredado en un zarzal, lo tomó y lo sacrificó en lugar de su hijo” (22,13).
Comentario: Es realmente suprema la prueba a la que Abraham es sometido. Nada menos que sacrificar a su hijo único, Isaac, que había sido tan solicitado a Yavé porque Sara era estéril, tan deseado por sus padres y, una vez nacido, en él tenía puestas todas sus esperanzas porque en él se realizarían las promesas. 
¿Cómo pudo Abraham aceptar el sacrificio de su hijo? Ante todo, porque se dejó guiar por la fe, la obediencia y la confianza en Yavé. Además, parece que los sacrificios humanos eran costumbre entre los cananeos. El patriarca Abraham será para siempre ante la Humanidad el modelo de fe y de obediencia, e Isaac, al asumir su sacrificio, será figura de Cristo que acepta en la cruz la voluntad del Padre.
La recompensa de Abraham: “Por no haberme negado a tu único hijo, yo te colmaré de bendiciones y multiplicaré tu descendencia,...por ella serán bendecidas todas las naciones de la tierra, por haberme tú obedecido” (Gen 22,16-18).
Comentario: Las tres grandes religiones monoteístas, Judaísmo, Cristianismo e Islán, consideran a Abraham su “padre en la fe”. Guiado por la fe, Abráham rechazó los ídolos de la gente de Ur y cumplió el mensaje de Yavé: ”Sal de tu tierra y de tus parientes y ve a la tierra que yo te mostraré”. Abraham fue un emigrante por la fe, con todo lo que ser emigrante suponía en aquel tiempo y supone en el nuestro. Guiado por la fe, Abraham aceptó el sacrificio de Isaac, contra todo pronóstico y razonamiento humano. Sólo su fe da sentido a tal proceder.
Casamiento de Isaac: Dijo Abraham al más antiguo de sus siervos: Ve a mi tierra, a mi parentela, a buscar mujer para mi hijo Isaac. El siervo se dirigió a Aram Naharaím, región comprendida entre el curso superior del río Eufrates y su afluente, el Jabor; en medio de esta región se halla Harán o Jarán, la ciudad de Najor. A las afueras de Harán, junto a un pozo, se encontró con Rebeca que iba a sacar agua. El siervo dijo a Rebeca: Dame, por favor, un poco de agua de tu cántaro. Ella le dio de beber y también a los camellos y le confesó que era hija de Batuel, hijo de Melca, la mujer de Najor, hermano de Abraham. El siervo cayó en la cuenta de que Rebeca era prima de Isaac, en segundo grado, por ser nieta de Najor, el hermano de Abraham y le puso el arillo en la nariz y los brazaletes en los brazos y, tras las presentaciones y conformidad de la familia y de ella misma, partió con Rebeca hacia la casa de Isaac. Éste la tomó por esposa y la amó. “Tenía Isaac cuarenta años cuando tomó por mujer a Rebeca” (Gen 25,20).
Muerte de Sara: “Murió Sara en Quiriar Arbá, que es Hebrón, en la tierra de Canaán. Abraham hizo duelo por Sara y la lloró” (Gen 23,2).
Muerte de Abraham: “Abraham murio, en buena ancianidad, viejo y lleno de días y fue a reunirse con su pueblo. Sus hijos, Isaac e Ismael, le sepultaron en la cueva de Macpelá… con Sara, su esposa” (Gen 25,8-10)
GENEALOGIA DESDE ADAN HASTA ABRAHAM (2)
Hijos de Adán: Caín, Abel y Set.
Generaciones desde Set a Noé: Set, Enós, Cainán, Mahalcel, Jared, Enoc, Matusalén, Lamec y Noé.
Hijos de Noé: Sem, Cam y Jafet.
Hijos de Sem: Arfacsad, Selaj, Heber, Peleg, Reú, Serug, Najor y Teraj.
Hijos de Teraj: Abraham, Nojor y Harán.
Hijo de Abraham:  Isaac 
Esta es, a grandes rasgos, la historia del Patriarca Abraham, cuya fe ha sido y será siempre alabada por todos los creyentes en el único Dios.


(1) Se puede ver mi comentario a los once primeros capítulos del Génesis

(2) En azul la línea de transmisión genealógica.
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